El pacto cumple 2 años en el poder con la más alta desaprobación

Apurímac 10/12/2024.- El 7 de diciembre, hace dos años, con un vestido amarillo y con las manos arriba juró Dina Boluarte Zegarra como nueva presidenta del país. En ese momento prometió que trabajaría con las manos limpias, sin embargo culminará este año con siete investigaciones en su calidad de jefa de Estado. .Apenas inició su gestión, programó entrevistas con diversos medios nacionales y aseguraba que tendría ese diálogo constante con la prensa, alegando que no sería igual que su antecesor Pedro Castillo, pero eso duró solo meses. Este año decidió alejarse de los hombres de prensa y acudir a toda actividad oficial con un fuerte contingente policial y hasta francotiradores. En otras ocasiones encerró a los periodistas para que no se acerquen a hacer sus preguntas.Su primer año se caracterizó por el rechazo de la población que protestó contra su asunción al mando del país y la brutal represión de las PNP y las FFAA. 2024 fue distinto. Las marchas ya no eran por haber asumido la Presidencia, sino por su mala gestión en la lucha contra la criminalidad, en política económica, en gestión de infraestructura, entre otros problemas.La popularidad de Dina Boluarte Zegarra pasó de dos dígitos a apenas un 3 %. Además fue noticia en el mundo luego que allanaran su casa por el caso Rolex. Pero no fue todo, los empresarios también empezaron a desaprobarla. Solo un 6 % la respalda.Sus denuncias por el caso Rolex, operaciones estéticas y reuniones, supuestamente irregulares, provocaron un rechazo mayor del país a la mandataria. Pese a ello, Dina Boluarte grita en cada actividad pública que terminará su mandato en julio del 2026.“Estaré hasta cuando esta banda presidencial se entregue al próximo mandatario que guiará los destinos del país por 5 años”, aseguró luego de una semana en la que los parlamentarios reavivaron una moción de vacancia por abandono de cargo, tras revelarse la rinoplastía de la jefa de Estado.Si bien Boluarte Zegarra tiene varios cuestionamientos, también cuenta con dos bancadas que apoyan que termine su mandato: Alianza Para el Progreso y Fuerza Popular.La primera agrupación liderada por César Acuña instó a los legisladores a no presentar mociones de interpelaciones, censura y vacancias. Por el contrario, exhortó a que ‘apoyen la estabilidad’. Y Keiko Fujimori envía a Patricia Juárez que se pasee por todos los medios defendiendo al Ejecutivo. A cambio de ese apoyo, Boluarte debe firmar, sin ninguna observación, todas las leyes que le envía el Congreso, que benefician a las organizaciones criminales y a los políticos y partidos metidos en casos de corrupciónFuente: Crónica Viva