A partir del primero de Octubre de este año, todos los proveedores del Estado deberán emitir facturas electrónicas. Tanto por la venta de bienes cómo por la prestación de servicios, así lo dispuso la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (Sunat).
Ante esto, José Asti, director de Asuntos Financieros de la Sociedad de Derecho y Empresas Digitales (Sodital), señaló que la facturación ha permitido hacer un mejor seguimiento de las órdenes de compra entre proveedores y el Estado.
Desde hace tres años se ha dado prioridad a la implementación de los servicios de facturación electrónica, ya que permiten la transparencia en los procesos de compra. Este tipo de facturación también permite a la Sunat tener un mejor control de la venta de productos y generación de valor para combatir los altos niveles de informalidad.
Además, en los últimos cinco años, se ha dado un fuerte incremento en el uso de las facturas en Perú. Sobre todo en las mipymes, que las utilizan cómo instrumento para conseguir liquidez inmediata a través del factoring.
José Asti añadió que “el Estado, a través de Sunat, ha estado brindando capacitaciones de cómo utilizar los comprobantes de pago, sobre todo las facturas cómo instrumentos y no solo cómo un papel más. Eso ha marcado la diferencia”.
Es así que, este tipo de servicio contable para pymes no sólo ha sido clave para la transformación digital del Estado,
sino que también viene beneficiando económicamente a miles de mipymes que buscan reactivarse y/o sostener sus negocios.
Así mismo, José Asti señaló que la pandemia ha dejado en stand by el DS No. 013-2020 que establece algunas modificaciones para mejorar el factoring. Con este Decreto Supremo, la orden de compra (documento anterior a la factura) pasaría a ser un título valor. Es decir, las empresas proveedoras del Estado podrían negociar antes de emitidas las facturas, y así obtener capital de trabajo. Pero, para que esto sea posible se requiere un reglamento.
Es cierto que la facturación electrónica tiene grandes beneficios para el sector empresarial y financiero. Sin embargo, pone en cierto nivel de desventaja a las empresas pequeñas frente a las grandes empresas. Debido a que, las empresas más grandes tienen la posibilidad de contratar facturadores electrónicos por los grandes volúmenes de facturas que emiten.
Por otro lado, las empresas pequeñas muchas veces no tienen cómo contratar un sistema de facturación, y tienen que manejar la carga laboral, gestión con proveedores y demás actividades diarias. Las mypes utilizan la plataforma de Sunat para la emisión de facturas, por lo que, es necesaria una mejora en este sistema para hacerlo más amigable, comentó José Asti.