Tragedia en Gaza: ataque aéreo Israelí mata a siete trabajadores de la ONG World Central Kitchen
El primer ministro, Benjamín Netanyahu, admite que el ataque fue forma “no intencionada” hacia los empleados de ayuda alimentaria
Un ataque aéreo de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en Gaza ha resultado en la muerte de siete trabajadores humanitarios de la reconocida organización de ayuda alimentaria World Central Kitchen (WCK). El suceso ha conmocionado a la comunidad internacional y ha llevado al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a admitir que se trató de un error no intencionado.
Entre las víctimas se encuentran cuatro ciudadanos extranjeros: un británico, un polaco, un australiano y un individuo con doble nacionalidad estadounidense-canadiense. La organización WCK confirmó que su equipo viajaba en un convoy claramente identificado con el logotipo de la entidad en el momento del ataque, el cual consistía en «dos coches blindados y un vehículo ligero».
José Andrés, el chef hispano-estadounidense que lidera la ONG, expresó su profundo pesar a través de las redes sociales: «Tengo el corazón roto y estoy de luto por las familias y amigos y toda la familia WCK».
INVESTIGACIÓN. El primer ministro expresó sus condolencias y agradeció al equipo médico que lo operó recientemente, al tiempo que admitió que las FDI habían alcanzado «de forma no intencionada» a los trabajadores humanitarios. «Haremos todo lo posible para que no vuelva a suceder», prometió Netanyahu, asegurando que se llevará a cabo una investigación exhaustiva del incidente.
El Ejército israelí informó que el Mecanismo de Investigación y Evaluación de Hechos, una entidad militar independiente, será la encargada de investigar el ataque. En respuesta a la tragedia, WCK ha suspendido sus operaciones en la región.
WORLD CENTRAL KITCHEN. La organización World Central Kitchen, fundada por José Andrés en 2010, se dedica a proporcionar alimentos en crisis humanitarias causadas por desastres naturales o conflictos armados. La organización ha estado presente en numerosos desastres globales, desde el terremoto de Haití en 2010 hasta la pandemia de COVID-19, repartiendo millones de comidas y colaborando con decenas de miles de voluntarios.
La entidad también ha estado activa en conflictos recientes, como la invasión rusa a Ucrania y la situación en Gaza. José Andrés, un reconocido chef y activista, ha hecho un llamado urgente a la paz: «No más pérdidas de vidas inocentes. La paz comienza con nuestra humanidad compartida. Tiene que empezar ahora».
Este trágico incidente pone de relieve los riesgos y desafíos que enfrentan los trabajadores humanitarios en zonas de conflicto y subraya la necesidad de medidas adicionales para proteger a quienes se dedican a ayudar a los más vulnerables en situaciones de crisis.