Para el historiador Antonio Zapata, el suicidio político de Pedro Castillo y su poca capacidad de gobernante, no supera la indignación del peruano rural que se veía representado en él. Este sector que ya no se identifica con el actual gobierno es el que protesta.
“Pedro Castillo tenía un poder simbólico elevado, sobre todo frente al campesinado, porque representaba que en 200 años de República, por primera y única vez, un representante del Perú rural había llegado al poder, que lo hayan sacado ha generado indignación y rabia”
Antonio Zapata, historiador.
Zapata añadió que el campesinado es persistente y, por tanto, no van a parar hasta conseguir sus objetivos concretos. En ese sentido existen dos posibles escenarios, o el gobierno podría retroceder y Dina Boluarte renuncie, o generar más represión con medidas más drásticas.
También destacó que vivimos una suerte de acumulación de crisis que, por un lado, explotaron en la pandemia con el más alto índice de fallecidos a nivel mundial. Esto, unido a la crisis política y los destapes de corrupción en años anteriores, generan la situación actual.
“La pandemia muestra la fragilidad de las estructuras de país que tenemos y eso es a mi modo de ver el acelerador del descontento. A esto se suma la profunda crisis política desde años atrás, y si aumentamos a eso la corrupción, el malestar es cada vez más profundo y complejo”
Antonio Zapata, historiador.
El historiador agregó que, si bien el Perú es un país violento en diversos ámbitos, las protestas difícilmente estarían dirigidas por remanentes del terrorismo. El creciente malestar con el sistema entre otros factores han llevado a las manifestaciones violentas que podemos ver en algunos lugares.
Escuche la entrevista completa con el historiador Antonio Zapata, a continuación: