El declive económico mundial provocado por la pandemia del COVID-19 ha traído miles de consecuencias a empresas que han tenido que cerrar, dejando a millones de personas desempleadas.
El Perú no queda por fuera de esta situación. Solo en Lima, desde abril hasta junio del presente año, 2.7 millones de personas han perdido sus empleos, dado que las empresas al no producir capital, tomaron la decisión de reducir personal.
Dichas estadísticas las pronunció el Instituto Nacional de Estadística e Información (INEI). Entre otros reportes, está el de la Asociación de Empresas Familiares, el cual informó que un 30% de las empresas regionales cambiaron de rubro para tener un capital productivo y evitar que la misma cerrará por la pandemia.
Aunque se haya dado inicio al proceso de reactivación económica el 4 de mayo, miles de empresas alrededor del territorio Nacional, han presentado cifras alarmantes de sus capitales generales. Muchas de ellas se vieron atrapadas por las reglas de la nueva normativa y no supieron cómo levantar su empresa durante la crisis, por ello encontraron que la mejor decisión era cerrarla.
El 30% de los empresarios cambiaron de rubro para salvar su negocio para evitar cerrar sus puertas y recuperar lo perdido durante estos meses.
Como se pudo notar en los últimos días. Hubo empresas de gran calibre que, por la pandemia, tomaron la triste decisión de liquidar a su personal y cerrar su empresa por tan terrible situación de no poder recuperar ese capital. Entre las empresas que cerraron este año, se podrían destacar las siguientes:
Con más de tres décadas brindando un servicio de transporte, fue una de las empresas que recientemente cerró sus puertas. Todo esto se manifestó a través de un comunicado de los directivos de la empresa donde informaban su salida del mercado por motivos de la proliferación del transporte informal.
Suceso que las autoridades no han podido detener por la tanta demanda de este medio. Por lo que la empresa se vio obligada a cerrar sus puertas y liquidar a sus empleados sin otra opción, lo peor de todo es que lo buses se quedarán barados en sus cocheras y las baterias para autos se dañaran y podrían incenciarse
En junio, la aplicación de delivery dejó de operar en Perú debido a los problemas generados con la pandemia y los protocolos determinados para reabrir el negocio post cuarentena.
«Esta es una decisión difícil, y nuestra prioridad ahora es minimizar en lo posible el impacto en nuestros equipos, socios restaurantes, socios repartidores y usuarios», indicaron en su comunicado.
Otra empresa de transporte que ha tenido un proceso de disolución y liquidación constante por la falta de recursos. Actualmente la compañía sigue funcionando en rutas hacia y desde el Perú a través de otras subsidiarias. Todavía no se ha dado un dictamen formal sobre su cierre definitivo.
A través de un comunicado a los medios, Cencosud informó que el 1 de julio iban a cerrar todas las tiendas Paris en el país. El controlador empresario Horst Paulmann, contaba con 11 tiendas en todo el Perú. A pesar de ser el cuarto operador del mercado, informó que no se alcanzaron los resultados esperados para garantizar la sostenibilidad de la empresa.
Tras 29 años ofreciéndole al público una gastronomía de primera, el restaurante se ha declarado en quiebra. La crisis por COVID-19 ha sido un gran problema, lo que hizo que se acumularán deudas de años pasados, generando una de mayor proporción, así lo confirmó Francisco Barrón Velis, encargado de realizar la liquidación de la misma.