De acuerdo con la Corte Superior de Justicia de Puno, los teléfonos celulares son usados como grillete electrónico para controlar a reos liberados.
El Juzgado de Emergencia Penitenciaria del Distrito Judicial de Puno, a cargo del magistrado Javier Arpasi Pacho, dispuso la cesación de prisión preventiva de otros once internos, por mínima lesividad y remisión condicional. Medidas que se vienen cumpliendo en el marco del Decreto Legislativo 1513 y la Directiva N° 008-2020-CE-PJ, aprobado por la R.A. 170-2020-CE-PJ del Consejo Ejecutivo del Poder Judicial, que reemplaza la prisión efectiva por comparecencia con restricciones y reglas de conducta.
En esta línea, los celulares son usados como grillete electrónicos; lo que se presenta como una nueva manera de controlar y ubicar a los internos que están siendo liberados de los penales con motivo del deshacimiento. Sin hacer a un lado otros sistemas de control.
También se supo que el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) de la región de Puno remitió una solicitud de cesación de prisión preventiva para 48 internos; sin embargo, 37 de estas no se aceptaron.
Entre las razones de negativa para la libertad de los internos, se encuentra el hecho de sentencias efectivas a varios años de cárcel. Esto indica que aquellos con condena no pueden presentarse para la medida judicial. De igual modo se conoce que la gran mayoría de quienes se les niega la petición vienen purgando condena por delito de tráfico ilícito de drogas.