Una investigación científica revela que un gran grupo de virus, incluidos los virus de la influenza y otros patógenos graves estarían robando señales de nuestro código genético para expandir sus propios genomas.
El equipo interdisciplinario de virólogos que hizo la investigación, examinó un grupo de virus, conocidos como virus de ARN de cadena negativa segmentada (sNSV), que incluyen patógenos graves y generalizados de humanos, animales y plantas domesticados, incluidos los virus de influenza y el virus de Lassa.
De esta forma, demostraron que, robando señales del código genético, los virus pueden producir una gran cantidad de proteínas previamente no detectadas.
Asimismo, los investigadores los etiquetaron como proteínas OVNI, ya que se codifican uniendo las secuencias del huésped y las virales. Lo cierto es que este tipo de proteínas no se conocían hasta este estudio.
El profesor asociado de Microbiología y autor del estudio Ivan Marazzi, expone que estas proteínas OVNI pueden alterar el curso de la infección viral y podrían explotarse con fines de vacuna.
“Para comprender cómo un patógeno antagoniza al huésped y establece la infección, necesitamos tener una comprensión clara de qué proteínas codifica un patógeno, cómo funcionan y la forma en que contribuyen a la virulencia”. Explica Marazzi.
Puedes leer: El diagnóstico de un ataque al corazón podría conocerse mediante una prueba de saliva.
Los virus no pueden construir sus propias proteínas, por lo que necesitan proporcionar instrucciones adecuadas a la maquinaria que construye las proteínas en las células de su huésped.
Además, se sabe que los virus hacen esto a través de un proceso llamado “cap-snatching”, en el que cortan el extremo de uno de los propios mensajes de codificación de proteínas de la célula y luego extienden esa secuencia con una copia de uno de sus propios genes.
También, estos genes novedosos son expresados por los virus de la influenza y, potencialmente, por una gran cantidad de otros virus. El producto de estos genes híbridos puede ser visible para el sistema inmune, y pueden modular la virulencia.